El Val Cresciano superior es un barranco de tres a ocho horas de descenso (en función del nivel del grupo) según las reseñas, con 540 metros de desnivel e innumerables rapeles, resaltes, saltos, toboganes...
El acceso es de unas dos horas, pero nosotros optamos por una alternativa muy interesante: realizar el acceso en helicóptero. La compañía Heli-TV, que opera desde el aeródromo de Lodrino, ofrece la posibilidad de volar hasta la cabecera del descenso por 120 euros el vuelo (4 personas).
Una vez arriba, empezamos el descenso por encima de la presa, entrando al río junto al punto de aterrizaje. Desde ahí y hasta la captación de agua, lo que encontramos es un tramo de aguas vivas: un primer resalte da paso a un par de saltos de unos 4 metros, y llegamos a un rápel de más de 20 metros, con mucha agua y recepción agitada. Este rápel carece de instalación, y debe montarse en un árbol situado muy por encima del cauce (muy expuesto). Luego un pequeño resalte nos deja en una poza con fuerte drosage en la pared de enfrente.
Tras esto llegamos a la presa, y a partir de ahí el caudal disminuye considerablemente: nosotros lo encontramos bastante bajo, e incluso desaparecía en algunos tramos, aunque las pozas estaban llenas. Aquí empieza una sucesión ininterrumpida de rápeles, resaltes, caos, algunos saltos y toboganes... todo ello excavado en el granito blanco de la zona, muy bonito. Algunos de los saltos son obligados, no tienen instalaciones que permitan rapelar. Ojo con esto...
Para realizar este descenso es obligatorio llamar previamente a la empresa hidroeléctrica Ofible y comunicar la intención de descender el barranco. Si nos dan el visto bueno, una vez finalizado el descenso debe llamarse nuevamente para comunicar la salida (teléfono +41 91 756 66 15).
Fuente:
http://iggybarrancs.blogspot.com/2017/10/val-cresciano-inf.html